Batman Begins, o como se debe hacer una película de superhéroes

Hace ya casi 20 años, en 1989, llegó la primera película de Batman (sin contar la del salto que hicieron antes con los protagonistas de aquella serie de ¡Splash!, ¡Caput!). Dirigida por Tim Burton, tenía su sello en cada fotograma. El tratamiento al conjunto era...burtoniano, ni muy bueno ni para nada malo. La secuela de esta (Batman Vuelve, 1992) aportó más de lo mismo, con el aliciente de una inolvidable Michelle Pfeiffer como Catwoman. La saga por desgracia continuó, pero no en ese buen sentido; sino en un sentido bizarro, punk, gay, facilón y estúpido a más no poder. Batman Forever (1995) y Batman & Robin (1997), a cargo de Joel Schumacher y con diferente reparto entre ellas y respecto a las de Burton, hundieron al personaje para el cine. Lo ridiculizaron tanto que acabó por caer en el olvido justo en la época de adaptaciones de personajes comiqueros para la gran pantalla... Pero ya le llegaría el tiempo de resurgir...

Fue en el 2005. Batman Begins, Con Chistopher Nolan (Memento) encargado de la dirección y el guión junto a David S. Goyer (Blade), logró hacer borrón y cuenta nueva de la única manera (al fin se dieron cuenta) que podía interesar realmente el personaje: con un guión sólido, coherente, centrado especialmente en Bruce Wayne y con secundarios teniendo su justo peso en la historia. En realidad creo que esto es lo que debería cumplir toda película para ser verdaderamente buena. Lo dijo Alias, con Casino Royale hicieron lo mismo y pegó el boom. Uno acaba harto de chistes malos, historias que se tienen que tragar con agua o no pasan y personajes planos y cortados todos con el mismo patrón.

Abandonada a su suerte tras la muertes del Sr.Wayne, Gotham ha ido dando tumbos desde entonces y el crimen y la decadencia llegan a límites críticos mientras Bruce Wayne, expulsado de su universidad, vuelve para el juicio contra el asesino de sus padres. Impotente por la situación de su ciudad, decide huir. El viaje que hace le cambiará para siempre y acabará por transformarlo en el hombre murciélago.

Este nuevo Batman (interpretado por Christian Bale) se centraba, como he dicho, en él. En como llegó a ser lo que era. En qué le motivo para llegar a la excéntrica decisión de ponerse un traje e ir a saltar de tejado en tejado. El hecho de ser alguien sin poderes especiales siempre hizo que este fuera mi superhéroe favorito; y en cierta forma creo que a la hora de desarrollarlo puede ser mucho más enriquecedor (como el tipo de superhéroes Watchmen).

Al más que correcto Bale le acompañan Katie Holmes, Michael Caine, Gary Oldman, Tom Wilkinson, Rutger Hauer, Cilliam Murphy, Liam Neeson, Ken Watanabe... Un reparto de actores curiosos por no ser 'tan' estrellas mediáticas pero si por ser buenos en su trabajo. Curiosa la elección de algunos de ellos; como la de Katie, que ya lo comenté con Alias, ¿Por qué ella y no otra? Para mi no lo hizo nada mal y yo le habría dado lo que pidiera a cambio de que siguiera apareciendo en la saga, pero bueno... Creo que salvo ella, el resto recibió muy buenas críticas. Igual que la película en general, un éxito de crítica y público.

Y como con todo lo excelente ocurre, aun estando en las mismas manos, la secuela se antoja(ba) imposible de superar a su predecesora... Hoy llega a los cines de España The Dark Knight (El Caballero Oscuro) abalada por muy buenas críticas y por una arrasadora taquilla... Ya os contaremos que tal, aunque no será hasta dentro de una semana... Pero si he esperado 3 años con sed de más...

Puntuación: 10 (sin sorpresas, es una de las mejores películas que he visto)